Comparto la sugerencia en el sentido de que los restos del general vitalicio Antonio Imbert Barreras, uno de los ajusticiadores del tirano Rafael Leonidas Trujillo, debería ir al Panteón Nacional, por considerar reúne las condiciones de gran patriota, pese algunos errores en que incurrió tras la revuelta armada de abril de 1965 al prestarse a una jugada política de la tropa interventora estadounidense.
Dado el gran arrojo que demostró junto a otros autores de la gesta patriótica del 30 de mayo de 1961, hizo ayer 55 años, el mayor general fenecido Imbert Barreras, reúne los méritos suficientes para ocupar un espacio en el Panteón Nacional.
Imbert , único sobreviviente de esa epopeya falleció este martes en la madrugas, en el Cedimat, a la edad de 96 años.Llevaba cierto tiempo alejado de las actividades públicas, recluido en su residencia en la capital dominicana.Fue el gran ausente del acto conmemorativo a los héroes de la gesta del 30 de Mayo, celebrado horas antes de su deceso.
Se da por hecho que previo a su funeral, el mayor general Imbert Barreras, recibirá los honores militares , religiosos y protocolares del Gobierno, incluyendo una declaratoria de duelo nacional.
Considero oportuno el que en los días porvenir , las cámaras legislativas se aboquen al conocimiento de una propuesta de ley proveniente del Poder Ejecutivo, que contemple el traslado de los restos al Panteón Nacional, aunque es de esperarse que el tema generaría opiniones en favor y contra.
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