Contratistas de esas obras denunciaron que han
hecho esfuerzos en vano por conseguir
que el gobierno asigne los recursos económicos para continuar los trabajos.
La
paralización de las obras, que abarcan
áreas básicas de los hospitales, limita los servicios de salud a los pobladores
de menores ingresos del país.
“Apenas
nos han dado los avances, y aunque hemos
enviados con regularidad las
cubicaciones de los trabajos realizados al Ministerio de Salud, los pagos no se
han realizado, dizque por falta de fondos”, expresó un contratista.
Entre los
contratistas que expusieron la situación figuran los ingenieros Delta Sánchez, a
cargo de los trabajos en el hospital Doctor Luis Morillo King, de la Vega;
Antonio Medrano, del regional Alejandro Cabral, de San Juan de la Maguana; Juan Romero, del Antonio Musa, en San Pedro de Macorís, y Zuleica Paulino, de la Maternidad San Lorenzo, de Los Mina.
La situación es dramática en esos y otros hospitales en proceso de remodelación por cuanto en la mayoría existen áreas esenciales inhabilitadas como salas de consultas, internamientos, servicios de rayo X, laboratorio, intervenciones quirúrgicas y otras que los mantienen semiparalizados.
La situación es dramática en esos y otros hospitales en proceso de remodelación por cuanto en la mayoría existen áreas esenciales inhabilitadas como salas de consultas, internamientos, servicios de rayo X, laboratorio, intervenciones quirúrgicas y otras que los mantienen semiparalizados.
A esta
situación se agregan graves problemas en el sistema eléctrico en algunos
centros que afectan áreas sensibles, como las de rayos X y hemodiálisis.
Asimismo, los servicios de emergencia en gran parte de
los hospitales son afectados debido al proceso de reconstrucción de esas áreas,
lo que constituye un dolor de cabeza tanto para el personal médico como para
los pacientes.
La denuncia de las precariedades en los 56 centros asistenciales estatales se
ha hecho recurrente en los días por parte de médicos, enfermeras y otro
personal de salud mediante protestas,
vigilia y paralización en los servicios, mientras crecen las protestas de los comunitarios
donde están ubicados los hospitales en rehabilitación.
Los trabajos
de remodelación afectan los servicios de los hospitales generales y municipales
del Distrito Nacional, provincias Santo
Domingo, Santiago, La Vega, San Juan, Provincia Duarte, Samaná, Barahona, San Pedro
de Macorís, Puerto Plata, Espaillat, Monseñor Nouel, San Cristóbal, Santiago
Rodríguez, Montecristi, Sánchez Ramírez, La Altagracia, Elías Piña, Independencia,
Bahoruco, Valverde, Dajabón y María Trinidad Sánchez y otros.
CONSIDERACIONES
La ingeniera contratista Zuleica Paulino sostuvo que es lamentable que
obras prioritarias, como la remodelación de
hospitales, estén paralizadas por falta de recursos económicos.
Sin embargo, señaló que tiene entendido que la demora en
el pago de las cubicaciones obedece a trámites burocráticos, que se reduzcan
ahora con designación de la nueva
ministra de Salud Pública, Altagracia Guzmán.
En tanto, la
contratista Delta Sánchez dijo que le
dieron el primer avance para iniciar los trabajos “y desde entonces no hemos
recibido ni un centavo”.
Indicó que el presupuesto para el trabajo en
el hospital Morillo King “es de algo más
de 40 millones de pesos”, de los cuales sólo ha recibido el 25% de
avance.
Medrano, responsables de los trabajos en el
hospital de San Juan dijo: “Ciertamente, los trabajos en los 56 hospitales
están paralizados, en algunos desde hace dos meses, debido a que no se han pagado las cubicaciones”, dijo.
“Los contratistas estamos atravesando por una
situación difícil, porque nos hemos endeudados con la banca y los suplidores
para avanzar las obras, confiados en que se pagarían oportunamente las
cubicaciones reportadas”, expresó Medrano.
Mientras que Romero, contratista de la remodelación del hospital
general de San Pedro de Macorís, explicó que en su caso ha cubicado más del 120% de la obra, y lleva más de tres meses esperando el pago y tiene
deuda por más de trece millones de pesos.
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