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| Wáscar Cavalo y Michael Valdez |
Los jueces del Tercer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional
condenaron este miércoles a 30 años de prisión a los dos implicados en el asesinato
del asistente del jefe de la Dirección Nacional de Control de Drogas
(DNCD), coronel César Augusto Ubrí Boció.
El tribunal, presidido por la jueza Gissel Méndez, sentencio a la
máxima pena a Wáscar Antonio Cavalo Montero y a Michael Antonio Valdez
Castillo, por homicidio, robo agravado y violación a la Ley 36 sobre
porte, tenencia y comercio de arma de fuego.
Los magistrados del tribunal, integrado, además por Daneira García y Bladimir Rosario,
condena a ambos al pago de una indemnización de 10 millones de pesos
cada uno a favor de los padres, esposa e hijos de Ubrí Boció.
Asimismo, También lo sentenció al pago de otra indemnización por dos millones de
pesos a favor del hijo menor de edad de la víctima, representado por su
madre, Felicia Raquel Tejada Espinal, como justa reparación de los daños
y perjuicios morales y materiales sufridos por éstos.
El tribunal tomó la decisión tras acoger el dictamen presentado por el
ministerio público, representado por los fiscales adjuntos Kelvin Colón y
Fadulia Rosa, quienes habían solicitado a los magistrados declarar
culpable a los imputados y en consecuencia condenarlos a la referida
pena.
La defensa de los imputados, integrada por Ingrid Hidalgo y Raimundo
Mejía, este último defensor público, había pedido al tribunal declarar a
sus defendidos no culpables.
Tras la lectura de la sentencia, los familiares de los imputados
vociferaban que se cometió una injusticia, ya que no son los
responsables de los hechos que se les imputan.
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